Tras la decisión de la Corte Suprema de Justicia de dejar firme la condena contra Cristina Fernández de Kirchner a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos, la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, volvió a manifestar su respaldo a la ex mandataria con un gesto simbólico: se tatuó una tobillera con flores y la palabra “dignidad” en su tobillo.

La jefa comunal, referente kirchnerista y una de las figuras más cercanas a Cristina, compartió en sus redes sociales imágenes del momento en que se realizó el tatuaje, acompañado por la frase: “¿Así que tobillera? Será un signo de dignidad”, en alusión directa al dispositivo electrónico que el Tribunal Oral Federal N.º 2 ordenó colocar a la expresidenta como parte de las condiciones de su condena.

Un símbolo de apoyo desde la militancia

La iniciativa de Mendoza no fue aislada. Días atrás, militantes kirchneristas se congregaron frente al domicilio de Cristina Kirchner, ubicado en el barrio porteño de Constitución, y lucieron tobilleras simbólicas adornadas con flores, luces e imágenes de la ex jefa de Estado como forma de protesta y respaldo frente al fallo judicial.

En declaraciones previas a la movilización a Plaza de Mayo bajo la consigna “Argentina con Cristina”, Mendoza declaró: “No es justo todo lo que vivimos. Cristina es inocente y está cumpliendo una condena ilegal. No tuvo un juicio justo”. Además, aseguró que la militancia continuará acompañando a la expresidenta: “Siempre vamos a estar donde esté Cristina”, remarcó en una entrevista con Radio Splendid.

El día de la marcha, la ex mandataria no estuvo presente, pero envió un mensaje grabado en agradecimiento a quienes se movilizaron en su apoyo. Desde el kirchnerismo estimaron que unas 500.000 personas participaron del acto.

La tobillera electrónica impuesta a Cristina Kirchner

Como parte de la condena ratificada por la Corte Suprema, Cristina Kirchner debe portar una tobillera electrónica para vigilancia remota. El dispositivo está conectado a una unidad instalada en su domicilio y envía datos en tiempo real al Centro de Monitoreo del Ministerio de Seguridad de la Nación, operativo las 24 horas.

El seguimiento está a cargo del Servicio Penitenciario Federal, bajo la órbita del ministerio liderado por Patricia Bullrich, e implica la elaboración de informes técnicos y socioambientales. La medida busca garantizar el cumplimiento estricto de las condiciones impuestas por el tribunal.